18 de mayo de 2009

GRANÁ 1971-1974



"El Athletic de Bilbao ha perdido por el club Cocherito...". El Mulo me grita por el teléfono desde Graná. ¿Qué coño está diciendo? El fútbol en mi caso es un cáncer materno que antes o después me tengo que extirpar definitivamente. "Paso del Barça...". "¡Qué no! ¡Qué lo tienes que contar! ¡En Lezama han dejado entrar al Domecq! ¡Y han sido los del Cocherito!". La madre que lo parió, está zumbado. "Desde que en San Mames sólo salen Domecq, los del Barça pueden ponerse bonitos con la burra invalida". Definitivamente se le ha ido la olla. "¡Falta casta y bravura! Con eso se hubieran comido a esos mercenarios... o por lo menos les habrían hecho sudar". Alejo el auricular a medio metro de mi oreja. Gritos de una mente enloquecida. Juramentos e injurias. Un largo rato sin pausa. Entonces, silencio. Miro el teléfono. Nada. Lo voy acercando de nuevo. Lentamente. Cuando vuelvo a tenerlo en su sitio oigo una respiración jadeando al fondo. "¿Mulo?". "Acho, recuerda nuestro equipo, el Graná F. C. (1971-1974). Recuerda a Fernández, Montero Castillo y Aguirre Suárez... Recuerda la cornada de toro a Amancio".

Entonces, revisionando en mi cabeza esa patada, rodeado de hogueras en las gradas de "Los Cármenes", me di cuenta de que tenía razón. Bilbao está descastado.
Hay que recordarles al Granada F. C. (1971-1974).
Haremos un poco de memoria de este equipo para que entiendan al Mulo. Empezando por una introducción a cargo de mi admirado Enric González:

"Fernández, Montero Castillo y Aguirre Suárez, allá por los 70 fueron antecesores de los Latin Kings y otras bandas violentas hispanoamericanas. Aunque su condición de futbolistas les impedía portar armas en el campo, resultaban de lo más peligroso. Su equipo, el Granada, daba miedo. Amancio no debe de haberse olvidado de aquel Granada. Una tarde de 1974, en Los Cármenes, Fernández le mandó al hospital de una patada. El parte médico indicó que la puntera había entrado tan hondo en el muslo que la herida parecía una cornada de toro".




El paraguayo Fernández iba siempre de frente, era un jugador todo ardor y entrega, no se escondía, como sí que hacía su más famosa pareja de “baile”, Aguirre Suárez. Fernández era duro, muy duro en ocasiones, pero al menos era previsible; lo que arreaba no pretendía disimularlo, como sí que hacía el otro componente de la famosa dupla ("la pareja quirúrjica" R. Ramos dixit), especialista en la patada en la espinilla forastera “mirando al tendido”, del codazo a la higadilla como quien no quiere la cosa y otros primores que nadie veía pero que más de una vez acababan con un jugador contrario en camilla (alfileres para pinchar a los contrarios; comentarios subidos de tono acerca de alguien de la familia o entorno de un rival; zancadillas a discreción mientras nadie me mira; mano tonta que se introduce en un ojo del otro, ¡vaya por Dios!; arena a los ojos de un guardameta estorbón y todo el largo repertorio de las pillerías más tópicas. Todo este repertorio tramposo acompañado del uso a discreción de los codos y otras partes de la anatomía, pero siempre con sutileza, bajo cuerda). Aguirre Suárez desembarcó en Granada (jugaría también en la U.D. Salamanca) tras haber sido suspendido en Argentina por un periodo superior a un año (algunas autoridades en la materia afirman que a perpetuidad) y condenado a un mes de prisión tras la final de la Copa Intercontinental entre Estudiantes de la Plata y el AC Milan (miren como acabó Néstor Combin). Durante tres temporadas, el campo de Los Cármenes fue el terror. Allí el que se atrevía a pasar de medio campo se jugaba la pierna o la cabeza. Su sola presencia sobre el césped hizo que más de una figura de por entonces sintiera un sudor frío recorrer su espalda. Dice Roberto Perfumo: «ya no hay centrales como él, una raza extinguida de hombres que eran fieras defendiendo el área». A mucha más distancia les sigue el tercer protagonista principal, un uruguayo, Montero Castillo, que llegó en el momento en que la negra leyenda alcanzó su máximo auge, en la 73-74, jugador también fiero en labores de contención, aunque éste en el centro del campo frente a los otros dos cuyo puesto era el centro de la zaga. Los tres eran todo lo leñeros y marrulleros que se quiera, pero también eran grandísimos jugadores y habían militado en clubes punteros; y su rendimiento mientras vistieron de rojiblanco hay que catalogarlo de magnífico.


(Néstor Combin)

Al Mulo y a mí, como a Marcial Lalanda en su Tauromaquia, nos encanta ver a los toreros en dificultades. Y que a continuación las solventen. Aunque no siempre pueda ser. El JP Domecq invitado por el club Cocherito hace todo lo contrario. Baja la casta y las dificultades. Resultando demasiada diferencia entre toro y torero. Entre Athletic y Barça. Falta de emoción. Final previsible. Aburrimiento.
Así que ya saben:
Larga vida a las corridas duras... y a las fieras con calidad que hacen sudar a la figura y al público.
Larga vida a ese Granada 1971-1974.

(Creo que esto quería decir el Mulo)

6 comentarios:

Pedro Bravo dijo...

Muy a mi pesar, salió manso el Athletic en la final. Un par de días antes vi la penúltima, también contra el Barça, y allí había bravos como Goiko, Urtubi, Dani, Argote...

Demasiada funda y un exceso de genética manipulada para el (imposible) lucimiento. Ya no queda casta...

Por cierto, Montero Castillo y Aguirre Suárez fue el nombre escogido inicialmente por Jota Planetas para su grupo paralelo, al que luego llamó Grupo de Expertos Sol y Nieve. Porsinolosabía, Mr SyM

javier dijo...

¡Larga vida!

Anónimo dijo...

No todo eran patadas, codazos, etc., en el Granada de la época porque ¿qué me dice usted de Porta, pichichi de la liga por aquéllos años a los que usted se refiere?
Oselito.

Anónimo dijo...

Sr. Sol y Moscas otra "faena" para el recuerdo.
Un saludo
Pgmacias

Tremenmulista Anónimo dijo...

Señor Sol y Moscas me voy a tomar la licencia si es ústed tan amable, y con el permiso de todos los lectores de este blog de transcribir un extracto de una entrevista donde el sufrido futbolista Amancio, junto al también mítico Iribar, se refieren a los incidentes que ocurrían en Los Cármenes a principios de los años 70.

Diario As, 12 de septiembre del 2008.
"En Granada, aquel inolvidable Fernández le produjo a Amancio la lesión más grave de su vida, una patada que le reventó un muslo. "La suerte que tuve es que no me pude levantar; si llego a hacerlo me remata Aguirre Súarez". Aquel Granada repleto de zagueros argentinos y uruguayos era temible. Iribar no tiene problema alguno en reconocer que "los leones del Athletic, la parte de ataque sobre todo, sufría la semana previa a los partidos en Córdoba y Granada unas extrañas molestias, ¡ja, ja!".

Esto da buena cuenta de lo temible que era defender colores visitantes en aquella época en Granada.
Por lo tanto, hermano SyM ¿Podriamos entonces, comparar aquel mítico estadio con los coliseos actuales de Ceret o Vic Fezensac, plazas en donde no existe el paseo para las estrellitas de turno y en donde todo el que va, para triunfar se debe dejar el alma, la piel o la espinilla enfrentandose a TOROS de verdad?.

Un abrazo amigo mio, solo decirte que desde mi minarete, en la Plaza la Cruz, aquí en la Graná del siglo 21, llevo unos días rezando por la pronta recuperación de uno de los pocos heroes que nos quedan.
Maestro Fundi ponte "güeno".

sol y moscas dijo...

Sr Oselito... Pooooooooooorta... en Graná dicen que todavía se escucharía el grito por las gradas vacías de "Los Cármenes" si este no hubiera sido derruido... Aunque yo recuerdo más al "Loco" Ñito con sus salidas hasta el centro del campo. un saludo


Sr Pgmacias, sr Javier... aquí seguimos por caminos secundarios: los Cármenes, la París-Roubaix, Vic, Ceret... un placer hacerlo con ustedes...

Sr Pedro Bravo... también hay que señalar que los nuevos "encastes" africanos, europeos, sudamericanos... hacen mucho daño al monoencaste vasco, que está en franca decadencia (¿cómo la casta navarra?). El Graná se trajo Santa Coloma del otro lado del charco y ese algo de picante encastó el equipo. Luego le echaron agua al vino y ahora andan por tercera o regional. ¿dónde está la casta hoy en día? ¿conseguirá sacarla el mayoral sevillano Caparrós?
(No sabía lo de J, de los Planetas he pasado toda mi vida... le di un tiento a la "Leyenda del espacio" por lo del flamenco, y la verdad, me di cuenta el salto que se da, hacia abajo, desde lo popular al pop... (escuchar a J farfullear y a continuación a Morente (aunque sea en horas bajas)... no hay color sr B)

Sr Mulo... Siga vigilando desde el minarete. Me uno a su rezo por la salud del Fundi. un abrazo