22 de marzo de 2012

BORGES TAURINO



Salieron, y si en Dahlmann no había esperanza, tampoco había temor. Sintió, al atravesar el umbral, que morir en una pelea a cuchillo, a cielo abierto y acometiendo, hubiera sido una liberación para él, una felicidad y una fiesta, en la primera noche del sanatorio, cuando le clavaron la aguja. Sintió que si él, entonces, hubiera podido elegir o soñar su muerte, ésta es la muerte que hubiera elegido o soñado.

Dahlmann empuña con firmeza el cuchillo, que acaso no sabrá manejar, y sale a la llanura.


El Sur, de Jorge Luis Borges

(Si esto no es taurino, que baje dios y lo vea)

12 de marzo de 2012

SIGNOS DE LOS TIEMPOS


Pasado y presente visual

Creo que sobran las palabras. Estos son los tiempos modernos y el aficionado que entra, o se asoma, solo pueden recitar el famoso endecasílabo (como algún maletilla del pasado cruzando bajo las calaveras de Zahariche):

Lasciate ogni speranza voi ch'entrate



(en versión Chicho)

Foto: arriba Campos y Ruedos, abajo algún casposo aprendíz de Disney

7 de marzo de 2012

SON LEGIÓN


Sí, es triste comprobar el éxito de la pura fórmula, de la comercialidad más descarada. Los ruedos están abarrotados de faenas de escaso mérito realizadas por individuos que posiblemente aprendieron la fórmula en espeluznantes escuelas taurinas, o por la tele... Pero no olvidemos que la maquinaria taurina se mueve en torno al público. Y la realidad es que existe un público no evolucionado, un público renuente a la variedad que demanda siempre lo mismo, lo que ya conoce. Y el nombre de este tipo de público es “legión”.

A Rafael Díaz Santander, de la editorial Valdemar, le casco la montera y muto sus palabras. En el fondo todos hablamos de lo mismo. Son legión.



6 de marzo de 2012

TRES ENTRADAS



Lo más cercano a la poesía en twitter se lo he leído hoy a mi compadre Chili. Ha dejado caer (sobre los militares de Cuadri): "esto de ver castaños será como ver un cometa" Y en el acto, es lo que tienen las metáforas, se ha materializado la afición tras un telescopio, vestidos de copernicanas maneras, buscando en el cielo astros, meteoritos y bravura, cometas y torería. De repente, todo ha cambiado. Un resquemor recordatorio por todo el pellejo. En el ruedo se mira hacía abajo y hacía dentro, como en Padova y, si no me viene mal recuerdo a la memoria, en este tendido somos mucho más del gran Vesalio. Por eso Chili, y también en homenaje a esa memorable sesión de tarde con más humo que en el Madison Square Garden de los 40 viendo en el ring Días de Cine, he pensado, y creo que estarás de acuerdo conmigo, que para un buen aficionado, ver un colorao de Cuadri bravo, será parecido a ese momento de Inseparables (Dead Ringers, Cronemberg), cuando a nuestra entrañable pareja de hermanos gemelos ginecólogos, interpretados magistralmente por Jeremy Irons, se les aparece dentro de la chica castaña esa sagrada mutación que es un utero de tres entradas. (al caballo).

Se te echa de menos, un abrazo.


Foto de familia: Chili y yo con una castaña de Cuadri.
Arriba, instrumental y faena...

4 de marzo de 2012

MILITARIZACIÓN


Esto dice la Lista Negra que resume el 2011:

Una mansada con solo fachada. Mansedumbre, descastamiento y sin fuerzas. Toros sin remate y anoréxicos. Animalejos indignos. Cabreo generalizado. ¡Vaya pestiño! Mansos y con poca casta. Justitos de presencia, poco picados, con embestida bobalicona. Vacíos por dentro. Falta de fuerza y de entrega. Gatunos. Estas ganaderías, de momento, mejor que sean utilizadas por las figuras en plazas menores, aquí que no se acerquen. Flojos, muy bajos de casta, rajados, nobleza con embestidas sin emoción, tarde para olvidar. Ni para remiendos. Impresentables. Comportamiento borreguil...

(Prevías: 10, 09, 08, 07)


Como dije, hasta la lista va perdiendo fuerzas, basta con tirar de hemerotéca... Este año, como mal de ojo, le vamos a mandar a todos estos degeneradores del toro la camada entera de los militares de Cuadri. Para que sus cadáveres, agujereados por puyas, banderillas y estoques, les persigan y acorralen en sueños hasta que despierten pidiendo perdón entre lagrimas por el pecado cometido.

Imagen vía Campos y Ruedos (aquí).